Sin palabras. Esa es la expresión que los hermanos
de la Soledad y todos los presentes en la Antigua Conventual Iglesia de la
Victoria nos habíamos llevado.
El pregón de Francisco José Segura Márquez fue una
perfecta exaltación hacía la imagen de Nuestra Señora de la Soledad pero no
solo hacía ella, también tuvieron cabida los otros titulares de la Sacramental:
tanto San Francisco de Paula como el Santo Cristo Yacente.
Con una palabras del Hermano Mayor, que precedieron
a Miguel Ángel Morilla, fiscal de la Hermandad y que ayer hizo las veces de
presentador del sevillano Francis Segura continuaban los actos en honor a la
imagen de Luisa Roldán, La Roldana, que desde las 11h de la mañana estaba a los
pies de su camarín en el Altar Mayor, expuesta en Solemne Besamanos.
Presencia de la Alcaldesa de Puerto Real, Mª Isabel
Peinado, algunos miembros de su equipo de Gobierno así como los sacerdotes de
la Victoria y San Sebastián además del resto de Hermanos Mayores y cofrades no
solo de la Real Villa llenaron una iglesia de la Victoria que se quedo pequeña
para el gran acto que fue.
Francis Segura, mezclo prosa y verso de una
excepcional manera, al igual que hace unos tres meses hiciera en las tablas de
la Maestranza en Sevilla pregonando la Semana Santa. Un derroche de ingenio,
ternura en diálogo continúo con la imagen de la Soledad.
Año Jubilar, que se abre con tres portazos, versos
perdidos en la mar más de 300 años esperando para ser tuyos Soledad, esa mirada
que el que no te conozca no se imagina como eres… No faltaron momentos más
distendidos, análisis de anécdotas como la de historia de San Francisco de
Paula, las cuales decidió resumir en una para “no tener que sacarla en
Septiembre ¿no?, José Carlos” refiriéndose a su gran amigo, mayordomo de la cofradía
del Viernes Santo y compañero de devoción en la Divina Pastora de Santa Marina
en Sevilla.
Para sorpresa, se entabló un diálogo con la “culpable”
de todo lo que se celebra, la que esculpió y entrego en 1688 la imagen de la
Soledad al Convento Mínimo que había en Puerto Real. Este diálogo, nos desveló
las sorpresas de cómo ella, realmente trabajaba para su marido, y el firmaba
las obras que ella realizaba, pero no era el caso de la Soledad. La voz de
Luisa Roldán fue recreada por Inmaculada Cádiz desde el Coro de la Iglesia.
Así daba por finalizado el pregón de este 325
Aniversario de la Bendición y Puesta al Culto de la imagen de la Soledad,
después de un inconmensurable aplauso a este sevillano, que no descarta poder
venir durante la semana del Triduo en la Prioral ó en la salida Extraordinaria
de dentro de una semana.
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